Buenos días a todos, hoy 22 de marzo de 2021 retomo este blog que hacía tiempo que no actualizaba. El motivo principal aunque no sirve de excusa es que me he dedicado todo el tiempo a preparar, registrar y publicar un libro sobre Multipotencialidad.

Por fin, después de 7 meses ha visto la luz y estoy muy contento de haberlo conseguido. Aunque este artículo no es una página de ventas, si no una aportación de mi visión sobre esta característica.

Este próximo jueves hago una presentación de aportación de valor sobre él y sobre lo que significa, y como he visto un poco lo que me está costando voy a ponerlo por aquí para tener una visión clara. Este término, aunque parece que últimamente se está hablando mucho de él, me he dado cuenta al explicarlo que no es fácil y que depende de cómo lo expliques puede parecer que todo el mundo lo es. Y no es así. Sólo son multipotenciales los que realmente se sienten así. Si después de leer esta entrada, te sientes reflejado pero no te sientes multipotencial, está bien. Si te sientes multipotencial, seguramente sentirás un gran alivio.

¿Qué significa ser multipotencial?

Ser multipotencial significa haber tenido o tener una gran variedad de intereses de forma simultánea en tu vida. Pero no sólo eso, si no tener una ansia de aprender y profundizar en ese conocimiento de forma casi obsesiva hasta que llega un día que lo abandonamos.

¿Por qué abandonamos?

Varios son los motivos que pueden llevarnos a abandonar un proyecto o interés que tengamos en un momento dado.

Puede ser que, lleguemos a niveles de conocimiento sobre la materia, en los que seguir aprendiendo, ya no supone un gran reto o ningún reto. Nos aburrimos de seguir y abandonamos. O que avanzar un poco más sobre esa materia, nos supone un esfuerzo que no estamos dispuestos a asumir.

Otro motivo puede ser que, aunque nos supone un reto lo que estamos aprendiendo, aparece algo nuevo que nos llama la atención y entonces, perseguimos ese nuevo interés, nuevamente de forma obsesiva y nos olvidamos de lo que teníamos entre manos.

También puede darse el caso que nos acechen miedos o bloqueos que nos impidan seguir:

El miedo al fracaso puede asolarnos al pensar, que dedicarle mucho tiempo a aprender algo que al final no nos va a llevar a ningún lugar, supone una pérdida de tiempo. También el hecho de compararnos con otras personas que están haciendo lo mismo que nosotros, pero que llevan mucho más tiempo, puede hacer que nos sintamos unos impostores en ese campo y que abandonemos por no sentirnos capaces de competir con otras personas más “especialistas”.

El miedo al éxito, también es un miedo recurrente, porque sentirnos encerrados en un único proyecto durante “demasiado” tiempo, puede bloquearnos y sentir que nosotros “no vamos a poder llevarlo a cabo, cambiamos demasiado de intereses”. Esto puede hacer que abandonemos algo que todavía amamos profundamente.

Las fortalezas de un multipotencial

La gran capacidad de aprender de forma rápida, con una curva de aprendizaje muy veloz. Y aunque pueda parecer que es algo pedante, el principal motivo de esto no tiene porque ser una inteligencia superior (aunque puede darse), si no que aprendemos con una gran motivación. Aprender y crecer en una nueva área nos motiva tanto que interiorizamos de forma muy rápida cualquier tema que tenga que ver con ese nuevo interés.

La motivación es una fuerza brutal a la hora de aprender, no solo para un multipotencial, cualquier persona que desee aprender algo, tiene que encontrar su motivación, y así aprenderá de forma rápida y profunda, y eso es algo que un multipotencial tiene con cada nuevo interés que incluye en su vida.

Además, según indica Emilie Wapnick en su libro, la capacidad de síntesis, de unir dos materias completamente diferentes y sacar alguna cosa intermedia que a nadie se le había ocurrido antes, es algo que podemos hacer de forma fácil y sin proponérnoslo (aunque si nos lo proponemos todavía pueden aparecer cosas maravillosas).

¿Qué significa la etiqueta Multipotencial?

Realmente hay mucha gente que se puede sentir identificada con lo que se explica de multipotencialidad, pero muchos de ellos pueden no sentirse identificados con la etiqueta en sí. En mi humilde opinión y de lo que he podido contrastar, la etiqueta “multipotencial”, ayuda realmente a la gente que tiene algún sentimiento de culpa o vergüenza por su característica. Por haber hecho muchas cosas y no acabar ninguna, por haber abandonado grandes pasiones sin un motivo aparente, o por sentirse inseguro con esta característica.

Ser multipotencial, una vez te das cuenta que no estás solo, es una sensación de liberación brutal. Es fantástico, maravilloso, pero no debe servir de excusa para seguir abandonando cosas sin ton ni son. Hay que gestionarlo, buscar lo que nos mueve y perseguirlo.

La etiqueta ayuda, pero no lo es todo. Hay que gestionarlo bien para poder seguir creciendo.

¿Qué hacer ahora?

Ahora que lo sabes, que te sientes identificado, es cuando comienza el verdadero reto.

Busca tu propósito de vida, aquello que te va a hacer levantarte por las mañanas y perseguirlo hasta conseguirlo y disfrutar del camino.

También sirve tener identificados los valores que hacen que todo aquello que hagas tenga un significado superior.

Puedes seguir haciendo de todo, pero debes gestionarlo con cabeza, sin dar tumbos entre materias que no te lleven a ningún sitio.

Estamos en semana Santa y hasta el próximo día 6 de abril estará en promoción a 2,69€. Si quieres aprovechar esta oferta puedes hacerlo en el siguiente enlace:

¡Por fin terminé algo! en Amazon

 Gracias por haber llegado hasta aquí.

Un abrazo

Jordi